miércoles, 4 de abril de 2012

Esa mujer...


Dicen de las abuelas que son como las madres pero con el doble de práctica... no puedo encontrar una frase mejor para describirla.

Mi abuela es esa mujer que nunca ha soportado que la llamaran abuela, ella es l'àvia. Para todos. Incluso mi familia política (en Córdoba) respeta que ella sea l'àvia, no la abuela. Mi àvia es esa mujer fuerte, capaz de llevar a sus 80 años una casa ella sola sin pedir ayuda, y tenerla más limpia y mejor que nadie. Mi àvia es esa señora con clase, que huele a crema hidratante y a polvos de talco, como digo yo, a limpio. Mi àvia es esposa ante todo, sacrificada como la que más, pero también es madre, es àvia y bisabuela, o lo que se corresponde, besàvia. Es la que hace los mejores macarrones, el caldo que sigue encandilando generaciones y que sabe "a ella"... Es ella la que tiene ese genio que ella tiene, que hace que todo el mundo la respete y la adore a partes iguales. Es ella la que cuando tiene a toda la familia unida siempre dice la misma frase "por mí y se puede acabar el mundo, porque ahora mismo lo tengo todo" y no se equivoca. Tan dura como una roca, como para superar una grave enfermedad y al mes de la operacion estar en casa como si nada, tendiendo la ropa en el balcon apoyada sobre una cicatriz que a todos nos dolería todavía. 

Mi àvia hoy cumple 80 años y hace meses, al enseñarle las fotos de mis pasteles, me dijo "si llego a los 80 te pediré un pastel para mi cumpleaños" Y aunque no me lo pidió, esta tarde iremos a verla y yo le llevaré su pastel de cumpleaños. 




Mi àvia no quiere que le regalen flores porque dice que están más bonitas en el campo, que los ramos de flor cortada no duran y las flores se estropean a los pocos días. Por ello, en su 80 cumpleaños yo voy a regalarle flores. No por llevarle la contraria. Flores que no se estropean, sino que se funden en tu paladar inundandolo de un dulce sabor a azucar y vainilla. Una imagen vale más que mil palabras, y si bien estas flores no se estropearán a los pocos días, es solo porque, al igual que las flores cortadas, no durarán más allá de hoy :)






Porque hoy es el 80 cumpleaños de esa mujer, esa dama de otros tiempos que ha sabido actualizarse, cambiar dos veces de moneda, usar un movil, un dvd y un televisor Lcd. Esa mujer que cuidaba de mi, mientras mis pobres padres pasaban horas cuidando de mi hermana en un frío hospital. Esa mujer, esa mujer a la que quiero con locura, aunque la falta de tiempo, las prisas y los demasiados quehaceres me impidan verla tanto como me gustaría. Porque verla mirar a mis hijas es verla reir y disfrutar, de ser más allá que mi àvia, sino su besàvia. Esa mujer que merece no 80 flores en su tarta sino en cada día de su vida.




T'estimem àvia!


2 comentarios:

  1. Que bonito pastel estoy segura de que le ha encantado a tu abuela, un saludo.
    Sweetagus

    ResponderEliminar
  2. Dios, que buena pinta tiene!!
    Es precioso! :D

    Un beso

    http://theladyoflovelysmile.blogspot.com.es/2012/04/ya-esta-aqui-este-es-mi-look-propuesto.html

    ResponderEliminar