Hoy hemos celebrado el aniversario de bodas de mis avis (abuelos, en catalan) El pasado miercoles cumplieron 58 años de casados, increíble, no? Hoy en dia es tan improbable llegar a ese aniversario que cada día que pasa es como un logro. No son tan mayores, pero estan juntos desde muy jovenes y se quieren tanto o más que el día en que se casaron. Es genial verles juntos, son una inspiracion y tienen mi completa devoción y adoración. Soy su nieta mayor, de pequeña pasé muchisimo tiempo en su casa y los quiero con locura. Por eso, cada año desde que me inicié en mi aventura repostera, el día en que celebramos su aniversario, les llevo un regalito dulce para el postre. Ellos pagan la comida, yo pongo el postre. El primer año fueron cupcakes, llevaba muy poco tiempo en el "mundillo" y sabía poco, pero me lo agradecieron mucho. El año pasado les llevé unas Doily biscuits que les encantaron y repartieron con amor para cada uno de sus hijos, nietas y bisnietas.
Este año les he llevado una tarta. Porque vi una foto navegando por internet y me gustó tanto que la llevé a cabo, pensando en ellos en cada pétalo de cada rosa. Ayer, al terminarlo, me gustó más aun que el que había visto en la idea inicial, modestia aparte.
Mi marido le ha hecho un book entero con diferentes aspectos en cada foto, y qué decir, no puedo decidirme por una sola, me encantan! Es un gran fotógrafo y me ayuda siempre a darle un toque genial a mis dulces.
Qué os parece, verdad que es bonito? Es un bizcocho de vainilla relleno de buttercream de chocolate. Lo que lo envuelve son galletas "fingers" de chocolate y las rosas son de fondant de chocolate blanco y negro y una mezcla de los dos. Espero que os guste.
Sweet kisses
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